miércoles, 27 de octubre de 2010

Sobre bosques y abismos


¿Se puede enseñar a vivir? ¿O sólo podemos aprender por nosotros mismos? ¿Podemos guiar por los caminos correctos, como si la vida fuera un bosque? ¿Podemos mostrarles, a los que apenas vienen a esta vida, a los que ya se acercan a este fuego, en donde están los abismos, en donde los pantanos, por donde no deben andar? ¿O acaso esos que apenas llegan al mundo no pueden escucharnos y tienen que caer, irremediablemente, en los mismos abismos en los cuales nosotros caímos y tienen que hundirse en los pantanos que sepultaron nuestros huesos? ¿Puedo yo enseñar a alguien a vivir? Para enseñar algo, debo primero saberlo, ¿yo sé vivir?

No hay comentarios: