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Podemos concluir que estamos en el despapaye. Afirmamos no un Estado Fallido, como preconizan los apocalípticos, sino algo, quizá, que viene antes del Fallido: estamos en un Estado Revuelto, en un Caldo de Oso, en un Estado en Desmadre, en una Sopa de Grillos.
El PAN tiene diez años diciéndonos que su Enemigo, su Cruela de Vil, su Némesis, su Antítesis e Infiel Opositor es el PRD y buena parte de los jurásicos priístas. Pero solo era cosa que llegase, como presidente nacional de dicho y confuso partido, César “El cabezón” Nava para que nos vinieran con la cándida noticia de que, mirándolos bien, los chicos malos de la oposición no son tan malos, tan irresponsables, tan corruptos. No, que van a ser, si son un PAN de Dios todos ellos, son lo que México necesita, carajo. Y vamos todos aliados, olvidando, haciendo a un lado (según ellos) sus profundas y violentas diferencias.
Veamos el caso de Durango: Acción Nacional tiene como candidato a José Rosas Aispuro. Wikipedia nos dice que Aispuro nace en Las Trancas, Durango, en donde la gente tiende a alcoholizarse con frecuencia. Ha sido diputado federal por el PRI en dos ocasiones, en los años noventa; luego, diputado estatal en el nuevo milenio; más recientemente, Presidente del Comité Estatal del PRI en dicho estado y después Presidente Municipal de Ciudad Victoria. Como podemos ver, su carrera en el PRI es más que sobresaliente y por ello podemos afirmar que es un priísta de hueso tricolor. Apenas el 30 de enero del año en curso, renunció a su partido de toda la vida, enojadísimo porque no le dieron la candidatura para Gobernador, que, como podemos ver, era el paso que le hacía falta para completar una exitosa carrera dentro del Partido Jurásico, al menos en su estado. Pero el Sr. Aispuro no pasará el año en soledad: el PAN lo aceptó en sus filas y lo lanza como candidato. Además, se alía, sin necesidad alguna, con su Némesis, con el partido que ha fustigado y fastidiado a Felipe Calderón desde que llegó a la Presidencia, el PRD. Durango tiene más de un millón 547 000 habitantes, ¿entre tanta gente no se les podría haber ocurrido algún buen candidato que, de preferencia, fuera, realmente, panista? Lo mismo, por cierto, está por suceder en Sinaloa, en donde otro priísta ardido por la carencia del correspondiente hueso, Mario López Valdez, apodado Malova, está por convertirse en el candidato del PAN y el PRD unidos.
Esto nos da que pensar: si se vota por el PAN, ¿se vota por el PRD de López Obrador, quien dice que Calderón le robó la Presidencia y entonces su gobierno es espurio? Si ganan los priístas neopanistas, como Malova o Aispuro, ¿gana realmente el PAN y el PRD? ¿Con quienes gobernarán dichos sujetos, mismos que han pasado tanto tiempo en el PRI?
El PAN tiene diez años diciéndonos que su Enemigo, su Cruela de Vil, su Némesis, su Antítesis e Infiel Opositor es el PRD y buena parte de los jurásicos priístas. Pero solo era cosa que llegase, como presidente nacional de dicho y confuso partido, César “El cabezón” Nava para que nos vinieran con la cándida noticia de que, mirándolos bien, los chicos malos de la oposición no son tan malos, tan irresponsables, tan corruptos. No, que van a ser, si son un PAN de Dios todos ellos, son lo que México necesita, carajo. Y vamos todos aliados, olvidando, haciendo a un lado (según ellos) sus profundas y violentas diferencias.
Veamos el caso de Durango: Acción Nacional tiene como candidato a José Rosas Aispuro. Wikipedia nos dice que Aispuro nace en Las Trancas, Durango, en donde la gente tiende a alcoholizarse con frecuencia. Ha sido diputado federal por el PRI en dos ocasiones, en los años noventa; luego, diputado estatal en el nuevo milenio; más recientemente, Presidente del Comité Estatal del PRI en dicho estado y después Presidente Municipal de Ciudad Victoria. Como podemos ver, su carrera en el PRI es más que sobresaliente y por ello podemos afirmar que es un priísta de hueso tricolor. Apenas el 30 de enero del año en curso, renunció a su partido de toda la vida, enojadísimo porque no le dieron la candidatura para Gobernador, que, como podemos ver, era el paso que le hacía falta para completar una exitosa carrera dentro del Partido Jurásico, al menos en su estado. Pero el Sr. Aispuro no pasará el año en soledad: el PAN lo aceptó en sus filas y lo lanza como candidato. Además, se alía, sin necesidad alguna, con su Némesis, con el partido que ha fustigado y fastidiado a Felipe Calderón desde que llegó a la Presidencia, el PRD. Durango tiene más de un millón 547 000 habitantes, ¿entre tanta gente no se les podría haber ocurrido algún buen candidato que, de preferencia, fuera, realmente, panista? Lo mismo, por cierto, está por suceder en Sinaloa, en donde otro priísta ardido por la carencia del correspondiente hueso, Mario López Valdez, apodado Malova, está por convertirse en el candidato del PAN y el PRD unidos.
Esto nos da que pensar: si se vota por el PAN, ¿se vota por el PRD de López Obrador, quien dice que Calderón le robó la Presidencia y entonces su gobierno es espurio? Si ganan los priístas neopanistas, como Malova o Aispuro, ¿gana realmente el PAN y el PRD? ¿Con quienes gobernarán dichos sujetos, mismos que han pasado tanto tiempo en el PRI?